A poco tiempo de la apertura de la Defensoría de los Derechos Universitarios de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), se recibieron al menos 14 denuncias de estudiantes y administrativos, por lo que se iniciarán las investigaciones pertinentes, explicó la defensora de los Derechos Universitarios, Griselda Sillerico.
Explicó que desde el inicio de sus funciones en el cargo hasta la fecha, se han recibido 14 casos, los cuales la mayoría son denuncias de estudiantes y también de personal administrativo. Manifestó que no puede revelar la temática de los casos porque están regidos en el principio de confidencialidad.
Mencionó que ante las denuncias se trabajará siguiendo un proceso que consiste en la atención de los casos, investigación, análisis, educación y promoción; así se identificará la problemática más atendida y la más común, para que en base a ello se trabajen propuestas para introducir normas que pudiese revertir los motivos de las denuncias.
TRES ETAPAS
Las denuncias que se reciban tendrán tres etapas, siendo la primera la “orientación”; la segunda la “actuación urgente” para los casos que no puedan esperar muchos días y se necesita la resolución de manera inmediata; finalmente, la tercera, es el “proceso del caso”, que comprende toda la investigación de la denuncia.
La Defensoría de los Derechos Universitarios, después de tres semanas de su creación y posesión de la Defensora, se encuentra instalando actualmente sus oficinas, donde atenderán las denuncias; tal departamento cuenta con un equipo multidisciplinario y dos abogados.
Sillerico dijo que tiene lista la propuesta del plan de trabajo y aseguró que se elaboró a través de una elaboración colectiva, tomando en cuenta a toda la comunidad universitaria y a estudiantes, docentes y personal administrativo.
TRABAJOS ACTUALES
Adelantó que se está trabajando en todos los aspectos, como estrategias comunicacionales, planificación, presupuesto, etc. Dijo que la Defensoría no sólo recibirá denuncias, sino que también irá en busca de ellas, visitando las 13 facultades; además, se recogerán sugerencias de trabajo.
La Defensoría tiene el objetivo de que toda la comunidad universitaria sea parte de sus actividades, para ello se lanzará una convocatoria del concurso y los estudiantes sean los creadores del logo de tal dependencia.
ACERCAMIENTO CON FUL
Asimismo, dijo que se tuvieron acercamientos con la Federación Universitaria Local (FUL), que es la máxima representación de los estudiantes, así como también con la Federación Sindical Docente de la Universidad Mayor de San Andrés (Fedsiumsa), con el objetivo de unir objetivos y articular esfuerzos.
La docente mencionó que la universidad es el indicador más claro del país, porque concentra diversidades, desde el enfoque étnico, generacional, discapacidad, de género, diversidad sexual; y una transversal del desafío será el tema de la no discriminación.
Estableció, asimismo, la diferencia que existe entre la FUL, quienes se encargan de velar por los derechos de los estudiantes, y la Fedsiumsa vela por los derechos de los docentes, y la Defensoría de los Derechos Universitarios es la encargada de investigar los casos; sin embargo, agregó que ambas deben coordinar y articularse entre sí.
APROBACIÓN DE LA DEFENSORÍA
En la gestión 2013 se aprobó el proyecto de que la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), para que tenga el Departamento de Defensa de los Derechos Universitarios. La idea nació de la propuesta de la Facultad de Ciencias Sociales, la que se hizo realidad el 12 de abril de la presente gestión, incluyendo tres estamentos: estudiantil, docente y personal administrativo.
Sillerico inició la carrera de defensa de los derechos humanos en la Defensoría del Pueblo, entidad que tuvo inicios en el 98, a la cabeza de Ana María Romero de Campero, periodista de profesión.
La UMSA tiene alrededor de 80.000 estudiantes, donde el 52% son mujeres, el 48% varones y alrededor de 100.400 funcionarios administrativos y un aproximado de 2.200 docentes.
Por otro lado, a través de un sondeo de opinión, Sillerico expresó que se pudo constatar que la comunidad estudiantil de la Universidad de San Andrés (UMSA) no tiene conocimiento de la existencia de esta nueva unidad defensora de los derechos universitarios.
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