Además se vio a jóvenes en estado lamentable, tanto varones como mujeres, y la policía brillaba por su ausencia. La venta de bebidas se realizó sin control alguno, ya que se observó a adolescentes con bebidas alcohólicas en la mano.
A pesar de los anuncios de medidas de seguridad, los excesos en el consumo de bebidas alcohólicas por parte de adolescentes y jóvenes se repitieron, en la entrada universitaria.
Las personas en estado de ebriedad orinaron en cualquier lugar de la ciudad, lo que provocó molestia en los transeúntes, ya que criticaron el accionar de éstas, y más bien exigieron a las autoridades a tomar cartas en el asunto.
El Diario realizó un recorrido breve por los alrededores del Prado, y en el camino se observó que la juventud continuaba bebiendo, tanto varones y mujeres; y la venta de bebidas continuaba.
Se observó también escenas muy criticadas de parejas que no midieron su comportamiento a la hora de demostrar cuanto se aprecian.
Mientras tanto las vendedoras de comida, bebidas, y de varios artículos se apostaron a lo largo de todo el prado para ofrecer una variedad de productos; la mayoría de ellos aprovecha estas fechas para obtener algo extra de dinero para su hogar.
La gente se quedó casi hasta el último minuto para observar la entrada universitaria, a pesar del frio que reinaba en el ambiente; y tampoco desaprovecharon en adquirir guantes, ya que la oferta estaba a la mano.
Entrada
Alrededor de 12 mil danzarines participaron en la XXIX entrada folclórica de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), la juventud mostró color, belleza, alegría y cultura. El número de fraternidades superó las 60.
El rector Waldo Albarracín destacó la participación de los universitarios. “Lo importante es la muestra de alegría y reivindicar la cultura e idiosincrasia y el carácter boliviano de nuestras danzas”, dijo.
La mayor entrada folclórica universitaria del país inició alrededor de las 9:00 con la fraternidad de la moseñada, interpretada por la Universidad del Adulto Mayor. Ingresó también, como es habitual, la danza de la “Llamerada de San Andrés”.
Como una de las novedades de esta versión, después de muchos años, se vio la danza típica de la región andina del país, “los kallawallas”, que representan a los curanderos, yatiris o sabios del lugar y que esta vez fue rescatada por el Taller Cultural CIPyCA de Viacha, de la carrera de Ingeniería en Producción y Comercialización Agropecuaria.
Además como todos los años se vio el gran despliegue de danzas pesadas como la morenada, el caporal, la diablada; asimismo los tobas, antawara, kullawada, entre otras.
Los distintos grupos partieron del distribuidor de la Autopista ubicado a la altura de la Cervecería Boliviana Nacional (CBN). Recorrieron las avenida Montes, Mariscal Santa Cruz, Bolívar, para finalizar a la altura del estadio Hernando Siles.
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